¿Usted es realmente fuerte? No se deje engañar

Eso texto en español (sin fotos e peliculas de putaría, en lo Paraíso Tangible en Wordpress): ¿Usted es realmente fuerte? No se deje engañar, http://avezdoshomens2.wordpress.com/2012/02/08/usted-es-realmente-fuerte/

Eso texto en español (con fotos e peliculas de putaría, en lo Para Hombres de Calidad y Mujeres Verdaderas): ¿Usted es realmente fuerte? No se deje engañar, http://avezdoshomens2.blogspot.com/2012/02/usted-es-realmente-fuerte-no-se-deje.html

This text in English (without sex pics and movies, at Paraíso Tangible): Are you really strong? Do not be fooled, http://avezdoshomens2.wordpress.com/2012/02/08/are-you-really-strong/

This text in English (with sex pics and movies, at Para Hombres de Calidad y Mujeres Verdaderas): Are you really strong? Do not be fooled, http://avezdoshomens2.blogspot.com/2012/02/are-you-really-strong-do-not-be-fooled.html

Texto original em português (sem fotos e vídeos de putaria, no Paraíso Concreto): Você é mesmo forte? Não se engane, http://paraisoconcreto.blogspot.com/2012/02/voce-e-mesmo-forte-nao-se-engane.html

Texto original em português (com fotos e vídeos de putaria, no A Vez dos Homens que Prestam): Você é mesmo forte? Não se engane, http://avezdoshomens.blogspot.com/2012/02/voce-e-mesmo-forte-nao-se-engane.html

Vamos a hacer la diferencia entre fuerte y resistente. Una cuerda resistente soporta mucho. Un puente de resistencia soporta muchos coches por encima y mucha agua corriendo abajo. Y así sucesivamente. La bolsa de arena que Mike Tyson utiliza para entrenar es resistente. Mike Tyson es fuerte.

La disciplina es diferente de auto-sadismo. La disciplina es tener fuerza de voluntad y concentración. Puede ser negarse un placer que tendrá un precio más adelante. Puede ser algo incómodo de hacer para alcanzar una meta. Pero el auto-sadismo, que mucha gente llama la disciplina, es ser adicto a la falta de placer y hacer lo que no debia ser hecho para quien no debia estar exigindo nada por nada como recompensa. Ejemplo: algunas empresas.

Las personas fuertes también lloran. Vea: personas que se quejan son débiles, pero admitir el propio sufrimiento es cosa para gente fuerte. Especialmente en algunos lugares represivos donde criticar el modo de vida es peligroso.

Las personas fuertes reconocen lo que las hace sufrir y luchan contra esto. Soportar a los sinsabores de un trabajo en una empresa tirana para mantener el apartamento clase media y pagar la pensión de su ex esposa y el estilo playboy de sus hijos no es fuerza, es resistencia.

Las personas fuertes no creen en Dios. Ellas tienen la inteligencia y la honestidad con ellas mismos para ver que Dios o la creencia en Dios no les ha ayudado nada.

Las personas fuertes pueden perder para los leones, pero no amenazan los gatos. ¿Personas valientes, que luchan, hacen y pasan, donde están por lo general? En las periferias, en los agujeros en el país y el mundo. Cuando estas personas amenazan a alguien de pegar, enviar a la cárcel, matar, esto, aquello, la persona sale de lá para ser exitosa en la vida y los tipos duros están en el mismo lugar, asesinados, encarcelados o follando con hombres viejos ricos.

Las personas fuertes prefieren utilizar su fuerza donde es necesaria a mostrar sus bíceps. La persona fuerte puede dejar el trabajo que el 80% de la humanidad piensa que desea tener para evitar la enfermedad. El hombre fuerte prefiere soportar ser llamado gay a follar con una perra y pagar una pensión al año siguiente. La mujer fuerte prefiere soportar ser llamada perra que dejar de hablar con los amigos (o en realidad follar con los amigos).

Esta fue una reflexión después de un mensaje de un amigo mio lejano (él es de Portugal):

Duarte Oliveira Joaquim

Enviado el 30/08/2011 13:41

La cuestión es que yo sólo tengo que ser fuerte cuando es necesario y no tengo que ser fuerte sólo para complacer a todo el mundo y sufrir.

(Comentario en "Por que não se comemora o Dia Internacional do Homem?" - ¿Por qué no se celebra el Día Internacional del Hombre?)

Gracias a este y todos los amigos.

Abigail Pereira Aranha